El Real Madrid recibirá este martes 30 de septiembre al Kairat Almaty, un equipo de Kazajistán que está ubicado a solo 300 km de la frontera con China y a más de 6.000 km de principales capitales de los países europeos, solo un 5% de su territorio pertenece a Europa y por eso juegan en UEFA.
Los merengues para jugar este partido harán un recorrido de unos 6,400 kilómetros en 12 horas de vuelo. Un primer vuelo de casi 7 horas, con tres horas de escala. Otro vuelo, y, entre tanto, un kit de supervivencia y la comida del avión.
El presidente Florentino Pérez no ha acompañado al equipo en el viaje a Almaty porque ha priorizado la final de la Supercopa de baloncesto que se disputó ayer entre el Real Madrid y el Valencia Basket en el Martín Carpena de Málaga.
A solo pocas horas del inicio del partido hay un caos absoluto en la entrada del estadio del Kairat Almaty. A tres horas para el partido, miles de personas en las entradas y todas colapsadas. En el estadio Caben 23.000 personas pero se esperan más de 30.000.
Un acontecimiento histórico para el club y el país, ya que este será el partido más lejano en la historia de la Champions para el Real Madrid, el club que más se ediciones disputó, más partidos jugó y más titulos ganó, tendrá un partido atípico en su competición fetiche.