El mundo del fútbol está de luto. El delantero portugués Diogo Jota, figura del Liverpool y de la Selección de Portugal, falleció en la madrugada de este miércoles 3 de julio de 2025 en un accidente de tránsito ocurrido en la autovía A-52 a la altura del municipio de Cernadilla, en la provincia de Zamora, España. En el mismo siniestro también perdió la vida su hermano, André Silva, futbolista del Penafiel.
El vehículo en el que se desplazaban, un Lamborghini de alta gama, se salió de la vía y se incendió tras el impacto. Según las primeras investigaciones, el accidente se habría producido por un posible reventón de neumático o un exceso de velocidad mientras intentaban adelantar a otro automóvil. Ambos hermanos quedaron atrapados en el vehículo y no pudieron ser rescatados con vida.
Diogo Jota, de apenas 28 años, se había casado el pasado 22 de junio con su pareja Rute Cardoso, con quien tenía tres hijos. Desde su llegada al Liverpool en 2020, se consolidó como una de las piezas claves del ataque red. A nivel internacional, disputó 49 partidos con la selección portuguesa, marcando goles importantes y participando en torneos de gran prestigio.
Su hermano menor, André Silva, de 26 años, también desarrollaba una carrera profesional como futbolista y era parte del plantel del F.C. Penafiel de la Segunda División de Portugal.
El trágico suceso ha conmocionado al fútbol europeo. Liverpool FC emitió un comunicado expresando su profundo dolor, mientras que la Federación Portuguesa de Fútbol anunció homenajes en todos los partidos del fin de semana, incluyendo minutos de silencio. Jugadores como Cristiano Ronaldo, Pepe y Bruno Fernandes han enviado emotivos mensajes de despedida en redes sociales.
La noticia ha tocado no solo a los fanáticos del fútbol, sino también a miles de personas que vieron en Jota un ejemplo de profesionalismo, talento y humildad. Su partida deja un vacío irreparable tanto en el deporte como en su entorno personal y familiar.
Diogo Jota y André Silva fallecieron haciendo lo que más amaban: vivir con pasión. Hoy, el fútbol llora a dos hermanos que dejaron huella.