El fútbol colombiano despide a uno de sus jugadores más queridos y talentosos: Sherman Andrés Cárdenas Estupiñán, quien a sus 36 años anunció oficialmente su retiro del fútbol profesional. Con una trayectoria que abarcó dos décadas, el mediocampista santandereano deja una huella imborrable en clubes como Atlético Bucaramanga y Atlético Nacional, y en el corazón de miles de aficionados.
Desde su debut en 2005 con Bucaramanga, Sherman construyó un palmarés envidiable:
Copa Libertadores 2016 con Atlético Nacional
Campeonato Mineiro 2015
Campeonato Paranaense 2017
Cuatro títulos de Liga colombiana
Copa BetPlay 2013
Superliga 2020
Jugó en 11 clubes, incluyendo Millonarios, Junior, Liga de Quito, Atlético Mineiro y Santa Fe, y disputó más de 500 partidos profesionales, dejando su sello con goles memorables y asistencias precisas.
Entre sus goles más recordados están:
El golazo a Atlético Mineiro en los octavos de final de la Libertadores 2013.
Su primer tanto con Bucaramanga, en un estadio lleno durante la feria de la ‘Ciudad Bonita’.
La anotación ‘maradoniana’ frente a La Equidad.
El penal dedicado a su hija Shenoa, quien luchaba contra la leucemia, en uno de los gestos más emotivos de su carrera.
Más allá del fútbol, Sherman es símbolo de resiliencia y amor familiar. En medio de la enfermedad de su hija, el deporte fue su refugio y su motor. Su fortaleza emocional y espiritual lo convirtió en ejemplo dentro y fuera de la cancha.
Atlético Bucaramanga, el club de sus amores, le rindió un homenaje en redes sociales con el mensaje:
“¡Gracias por tanto, Sherman! La pelota siempre al 30.”
Aunque no logró ser campeón con el Leopardo, expresó que habría cambiado todos sus títulos por una estrella con Bucaramanga. Ahora, se dedicará a sus proyectos personales:
Cancha sintética Sherman Cárdenas, ubicada en el Parque Internacional del Parapente.
Academia de fútbol para niños santandereanos, con el sueño de formar nuevas generaciones.
“Creo que ya terminamos nuestra carrera. Gracias por todo lo que obviamente me dio. Pero sí, ya tomamos la decisión y ya terminamos nuestra carrera.”
Con humildad, talento y gratitud, Sherman Cárdenas se despide como uno de los grandes referentes del fútbol colombiano. Su legado trasciende los títulos: es el de un hombre que jugó con el corazón y nunca dejó de luchar.